QUESADA PASIEGA

Este es, al menos para mi, sin ninguna duda el postre o dulce por excelencia de nuestra Tierruca, sin menospreciar a los sobaos, pero es que la Quesada entra bien a cualquier hora, ya sea para desayunar, de postre o a media tarde.
La receta que aquí os dejo es la que yo vi hacer en mi casa desde pequeño y que ahora, con algunos cambios que por necesidad tuve que introducir, hago yo. Originalmente la hacía con la nata que queda después de hervir la leche recién ordeñada, pero como eso ya no puede ser, pues la nata que uso es la fresca de Mercadona. Esto no es por propaganda sino que es el único supermercado que las trabaja. Las tienen en refrigerados junto a la leche fresca y las mantequillas. Son las tarrinas de la foto.

Espero que os guste y que la disfrutéis.

INGREDIENTES:

2 tarrinas de nata fresca marca Hacendado
400 gr de azúcar
1 cucharadita de canela en polvo
Ralladura de limón (al gusto)
3 huevos grandes
300 gr de harina
1 yogurt natural
400 ml de leche
Mantequilla (para engrasar el molde)

ELABORACIÓN:

Echamos la nata en un bol junto con el azúcar y lo batimos un poco. A continuación espolvoreamos un poco de canela en polvo, yo suelo echar una cucharadita y media de las de café aproximadamente, pero me gusta q sepa un poco a canela.
Después echamos la ralladura de un limón, lo removemos y echamos los huevos uno a uno. Hasta qué un huevo no esté bien introducido en la masa no echamos el siguiente para que quede homogéneo.
El siguiente paso es tamizar la harina e ir añadiéndola poco a poco a la vez que vamos removiendo.
Cuando ya esté la harina añadimos un yogurt natural y removemos. Por ultimo la leche y removemos bien rebañando bien los laterales del bol porque se suele quedar la masa ahí pegada.
Engrasamos una fuente de horno (yo por comodidad acostumbro a usar las bandejas desechable de aluminio  que hay en cualquier supermercado), echamos la masa y la metemos al horno que previamente habremos precalentado a 180 grados. La dejamos 40 minutos aproximadamente, dependerá del horno. Para saber sí está hecha sacudimos un poco la fuente y si no da la sensación de líquida es que esta hecha. Hay que tener en cuenta que al enfriarse se compacta un poco.
Un truco por sí se pone doradita y al sacudirla vemos que sigue un poco blanda es cubrirla con papel aluminio, esto hace que se cocine pero sin dorarse más.

Como veis es una receta muy fácil y el resultado espero que os guste.